5 jun 2012

Catedral de Toledo, Santa María


La catedral de Santa María de Toledo, llamada también Catedral Primada de Toledo, sede de la Archidiócesis de Toledo, es un edificio de arquitectura gótica, considerado por algunos como la opera magna del estilo gótico en España. Su construcción comenzó en 1226 bajo el reinado de Fernando III el Santo y las últimas aportaciones góticas se dieron en el siglo XV cuando en 1493 se cerraron las bóvedas de los pies de la nave central, en tiempos de los Reyes Católicos. Está construida con piedra blanca de Olihuelas (en el término de Olías del Rey).

Se la conoce popularmente como Dives Toletana (con el sentido de la rica toledana).
HISTORIA

Durante muchos años, la tradición popular no escrita ha venido contando que hubo en este lugar donde se encuentra la actual catedral un primer tempo de la época del primer obispo Eugenio. Este tempo fue consagrado por segunda vez en el año 587, después de habar sufrito alteraciones. La ciudad había sido sede obispal de la Hispania visigoda. Los numerosos Concilios de Toledo atestiguan su importante pasado eclesiástico.

Plano seción actual, Catedral de Toledo


La invasión musulmana no eliminó de inmediato la impronta cristiana y el obispado se trasladó y quedó establecido en la iglesia de Santa María de Alfizén. Se cree que el edificio obispal visigodo fue trasformado nuevamente para convertirse en la mezquita mayor de la ciudad de Toledo.

Manuel Bartolomé Cossío (1857-1935), pedagogo y profesor universitario español, hizo la siguiente crítica: "La catedral de Toledo es el ejemplo más netamente español de arquitectura gótica, la cual experimenta aquí una adaptación al medio clásico; es la primera en España y una de las pocas en el mundo en cuanto a belleza y perfección"

Entre los datos arqueológicos actuales es posible observar algunos vestigios de la construcción musulmana: una columna islámica empotrada dentro de la capilla de Santa Lucía; los fustes marmóreos que guarnecen el exterior del coro son un aprovechamiento de una antigua construcción musulmana; los arcos entrecruzados de estilo califal en el triforio de la capilla mayor y en el de la girola, coinciden con la tradición constructora musulmana de Córdoba, si bien evidentemente su estructura es de traza cristiana.

La ciudad de Toledo fue conquistada por Alfonso VI, rey de León y Castilla en 1085. Uno de los puntos de las capitulaciones que hicieron posible la entrega de la ciudad sin derramamiento de sangre fue la promesa de este rey de conservar y respetar los edificios de culto, las costumbres y la religión tanto de musulmanes como de la gran población cristiano-mozárabe; naturalmente, la mezquita mayor se hallaba comprendida en ese compromiso. 


Catedral de Santa María, Catedral de Toledo.
El asunto fue que el día 25 de octubre de 1087, el arzobispo (de acuerdo con la reina Constanza) envió gente armada para que se adueñara por la fuerza del recinto de la mezquita. Después de este lance, instalaron un altar provisional y colocaron una campana en el alminar. Rey Alfonso VI se enfadó tanto que dictó sentencia de muerte para casi todos los implicados. La leyenda cuenta que fueron los musulmanes los verdaderos intermediarios para conseguir la paz, con la figura del negociador y alfaquí Abu Walid quien llevó al rey un mensaje de tolerancia en el que se decía que aceptaban como legítima la usurpación. En recuerdo y gratitud de este gesto, el Cabildo catedralicio del siglo XV le dedicó un homenaje y encargó su efigie para colocarla en uno de los pilares de la capilla mayor, perpetuando de esta manera su recuerdo. 

No se conservan los planos de lo que fue la mezquita ni se sabe cómo era esta construcción, pero puede suponerse que sería un edificio columnario, con arquería de herradura sobre columnas tal vez aprovechadas de otras construcciones romanas y visigodas.

Se hicieron las obras necesarias para establecer el culto cristiano romano, entre otras el cambio de orientación del presbiterio y capilla mayor. Urbano II le reconoció en 1088 su condición de catedral primada sobre las demás del reino. La mezquita-catedral se mantuvo casi intacta hasta el siglo XIII, año de 1222, en que una bula del Papa Honorio III autorizó a emprender las obras de la nueva fábrica que se iniciaron en 1224 (o 1225) y cuya ceremonia oficial de colocación de la primera piedra tuvo lugar en 1226 (otras fuentes dicen 1227), con la presencia del rey Fernando III el Santo.  Después de cuatro siglos se realizan nuevas obras.

El edificio de la catedral tal y como hoy se contempla es obra del siglo XIII, época del arzobispo de Toledo Rodrigo Ximénez de Rada y del rey Fernando III el Santo.   puesta de la primera piedra(1227). Ximénez de Rada en su mente estaba la construcción de una gran catedral digna de esta ciudad que él gobernaba. Por entonces, la mezquita-catedral se mostraba bastante vieja y ruinosa; incluso algunas secciones habían sido demolidas por su antecesor. La mezquita-catedral disponía de un amplio espacio, pero era de poca altura y le faltaba la esbeltez de otros templos de similar importancia. Ximénez de Rada fue el entusiasta promotor de la nueva catedral que se edificaría al gusto de la época, en estilo gótico.

Ximénez de Rada fue tan entusiasta con el proyecto y tanto se involucró en él, que se llegó a decir que fue el autor-arquitecto de las trazas de la nueva catedral; afirmación totalmente fuera de lugar según los historiadores y arquitectos. El arzobispo pasó unos años manteniendo y reforzando el antiguo templo a la espera de que su sueño fuera realizado.

CATEDRAL ACTUAL












Plano Catedral de Toledo


La estructura del edificio tiene gran influencia del mejor gótico francés del siglo XIII pero adaptado al gusto español. Mide 120 m de longitud por 59 m de ancho. Consta de 5 naves más crucero y doble girola. La parte más antigua del templo es la cabecera. Los frifolios que se conservan de la cabecera son de influencia mudéjar. El más bajo está compuesto de arquillos lobulados que descansan en columnas pareadas y el alto presenta unos arcos entrecruzados típicos del mudéjar. No se sabe si estos temas mudéjares existían en la anterior mezquita y fueron copiados como recuerdo o bien se añadieron en una de las mejoras y enriquecimiento de la fábrica, como algo original y de buen gusto.
En la cabecera se encuentra la doble girola que es doble como corresponde a una planta de 5 naves. Esta doble girola es de proporciones grandiosas y está enriquecida por elementos arquitectónicos y por un original abovedamiento.

Nave central, comienzo de la girola.

Los tramos de la girola correspondientes a las distintas capillas se solucionaron con plantas alternativas de rectángulos y triángulos, lo que hizo que cada capilla fuera de distinto tamaño, más grandes las rectangulares y más pequeñas las triangulares. Esta manera de distribuir la cabecera puede verse en las catedrales francesas de Notre Dame en París. Las bóvedas de las naves son cuatripartitas excepto en el crucero y capilla mayor en que se refuerzan con terceletes.


Bóveda cuatripartita de la Catedral (con anotaciones en rojo indicando que son los terceletes)
Los maestros constructores

Durante siglos se tuvo la total seguridad de que el primer maestro arquitecto de la catedral de Toledo fue Petrus Petri -inscripcion en lenguaje no culto sobre una lápida- (Pedro Pérez). Tal certeza se basaba en el único testimonio existente sobre la autoría, testimonio grabado sobre una lápida, bien a la vista donde se puede ver esta leyenda escrita en un latín no muy culto.

A mediados del siglo XX, el obispo de Ciudad Real investigó a fondo en este tema y sacó a la luz una serie de documentos que vinieron a demostrar la existencia de un primer maestro anterior a Petrus Petri llamado maestro Martín. En escrituras de años posteriores aparecen los nombres de Martín (albañil) y Juan Martín (maestro de albañiles), que se cree serían parientes suyos. No han aparecido nuevos documentos.

A estos argumentos hay que añadir que la fecha del comienzo de la construcción cuadraba mal con la edad de Petrus Petri que por aquellos años debía ser demasiado joven para ser arquitecto.

En conclusión, los estudios realizados después de este hallazgo indican que el maestro Martín sería el autor de las capillas de las girolas y que al desaparecer por muerte o por ausencia tomó el peso de la dirección de las obras el maestro Petrus que terminó las girolas y construyó los triforios al estilo toledano. A finales del siglo XIII estaba concluida la cabecera y dos tramos de las naves del lado sur.

A finales del siglo XIV aparece documentada la figura del maestro Rodrigo Alfonso, que puso la primera piedra del claustro en 1389, bajo el patronazgo del arzobispo Pedro Tenorio que murió diez años después. Este arzobispo se ocupó de bastantes obras de la catedral, como la capilla de San Blas en el claustro que es famosa por la riqueza artística de sus frescos de la escuela de Siena.

El siglo XVI es el siglo de oro para Toledo que es llamada la Ciudad Imperial.
El siguiente maestro de quien se tiene noticia fue Alvar Martínez (otras veces González), que fue aparejador de las canteras de Olihuelas en el término de Olías del Rey. Es el autor de la fachada de poniente que se comenzó a construir en 1418. Las reformas hechas en 1787 hacen que esta fachada no se pueda contemplar como era realmente en su origen. También fue el autor de la única torre de la catedral. La coronación de la torre fue hecha por otro gran maestro: Hannequin de Bruselas. Con Hannequin llegó un grupo de maestros ilustres: Egas Cueman, Enrique Egas, Juan Guas, que trabajaron en portadas, capillas y obras suntuarias dando fin con su labor a la obra gótica. Las bóvedas de los pies de la nave central se cerraron en 1493, bajo la dirección de Juan Guas y Enrique Egas, con el mecenazgo y supervisión del cardenal Pedro González de Mendoza.

Exterior

:: Puerta del Perdón: La fachada principal tiene tres portadas, Puerta del Perdón en el centro, Puerta del Juicio Final a la derecha y Puerta del Infierno a la izquierda. La puerta del Perdón es del siglo XV: se comenzó, bajo la dirección de Alvar Martínez, en 1418. Se llama así porque hubo un tiempo en que se concedían indulgencias a los penitentes que entraban por ella. Tiene un gran arco con seis arquivoltas góticas. Sigue la iconografía clásica del gótico, con la figura del Salvador en el mainel y un apostolado en las jambas, y en el tímpano aparece la Virgen imponiendo la casulla a San Ildefonso, tema muy especial de esta catedral que se repetirá en el interior en capillas y pinturas. Las hojas de la puerta miden más de 5 m de altura y están chapadas en bronce y muy trabajadas; son del siglo XIV. 


Puerta del Perdón, Catedral de Toledo.
:: Puerta del Reloj: Es la más antigua de comienzos del siglo XIV y se encuentra en la fachada del lado norte. Recibe además el nombre de la Feria porque daba salida a la calle donde antaño se celebraba la feria. El tímpano está dividido en cuatro fajas horizontales, en las que se muestran escenas de la vida de Cristo: En la parte superior del tímpano se representa el Tránsito de la Virgen. El parteluz o mainel está decorado con la imagen de la Virgen y el Niño. En las jambas hay imágenes de reyes y santas, todo ello obra del escultor Juan Alemán que trabajó también en la portada de los Leones.
Puerta del Reloj, Catedral de Toledo.

Por encima de esta portada se aprecia la obra posterior de Durango, en estilo neoclásico del siglo XVIII, igual que en la fachada principal. Es obra de consolidación por el mal estado en que se encontraba la piedra. El intercolumnio central está ocupado por la esfera del reloj que da nombre a esta puerta. 

:: Puerta de los LeonesDel siglo XV y XVI. Es la más moderna de las grandes puertas. Se llama así por los leones que coronan las columnas de la reja que cierra el pequeño compás. Tiene además otro nombre: Puerta de la Alegría, en alusión a la celebración de la Asunción de la Virgen que está representada en el testero del fondo, tras las arquivoltas.
La estatuaria de la puerta es uno de los mejores conjuntos hispano-flamencos del siglo XV, sobre todo la Virgen del parteluz y las estatuas de las jambas. Los querubines y ángeles músicos que acompañan la subida de María a los cielos son obras de arte ejecutadas con gran delicadeza. La fachada fue alterada por Durango y Salvatierra en el siglo XVIII, igual que en las otras puertas, para consolidar el edificio.

Puerta de los Leones, Catedral de Toledo.

El interior de la puerta corresponde al gran frontis del crucero en su lado meridional sobre el que descansa el balconcillo con balaustrada renacentista que soporta la tribuna donde está el órgano del Emperador, el más antiguo de la catedral, de mediados del siglo XVI, con la caja ejecutada en piedra. Es tradicional que suene este órgano en la festividad del Corpus Christi al regreso de la procesión. Más arriba se ve el gran rosetón, enmarcado en un cuadrado cuyas enjutas están labradas con rosáceas.

:: Torre: En origen, el proyecto fue levantar dos torres, una a cada lado de la fachada occidental, pero sólo llegó a elevarse una, la de la esquina noroeste, mientras que de la opuesta sólo se levantaron los primeros tramos, siendo éste el lugar donde más tarde se construiría la capilla mozárabe.

Torre, Catedral de Toledo.
Es gótica, con alguna influencia mudéjar. Tras una elevada base de planta cuadrada. El remate de la torre con el cuerpo octogonal fue obra del arquitecto Hanequin de Bruselas que llegó para trabajar en esta catedral junto con un grupo de grandes figuras: Egas Cueman, Enrique Egas y Juan Guas entre otros. El cuerpo octogonal está acompañado de pináculos y arbotantes y se remata con una flecha que soporta tres coronas imitando una tiara.


INTERIOR

Las capillas mayores y menores concebidas en el proyecto de Rodrigo Ximénez de Rada rodeaban en sus orígenes la cabecera de la catedral. De ellas, algunas desaparecieron y otras se ampliaron o reordenaron. 

En las sucesivas remodelaciones y obras, casi siempre se siguió el criterio de avanzar desde la cabecera de la catedral hacia el muro, y eso explica bien el trazado actual, a veces caótico, con respecto a los primeros diseños.

La capilla de Santa Lucía constituye uno de los pocos espacios donde se pueden apreciar restos de la antigua mezquita y en concreto, una columna y su capitel.


:: Capilla Mayor: La capilla mayor de la catedral acumula una gran riqueza en obras de arte, empezando por la propia arquitectura del recinto. En su origen estaba separada en dos partes con dos bóvedas independientes. La bóveda poligonal pertenecía a la capilla de los Reyes Viejos que quedaba algo separada. Con esta división, el presbiterio resultaba algo estrecho y no muy propio de semejante catedral. El cardenal Cisneros tuvo muy claro reconstruir esta parte de la catedral y tras algunas situaciones de enfrentamiento con el Cabildo, consiguió el consentimiento para demoler la dicha capilla de los Reyes Viejos, hacer el presbiterio más amplio y dar espacio suficiente para el gran retablo gótico que él mismo había encargado.


Capilla Mayor, Catedral de Toledo

:: Capilla del Sepulcro dentro de la capilla mayor: Debajo del altar mayor está la capilla del Sepulcro a manera de cripta. Se accede a ella por fuera del presbiterio y a través de una puerta enrejada que conduce a las escaleras de bajada. Es una capilla abovedada que contiene tres altares.

:: Retablo de la Catedral de Toledo: Es un retablo gótico florido, una de las últimas manifestaciones de este arte que desaparecía para dar paso al Renacimiento. Fue encargado por el cardenal Cisneros; la obra se inició en 1497 y terminó en 1504. Entre los arquitectos, pintores y escultores que intervinieron en esta obra maestra colectiva, estuvieron: Enrique Egas y Pedro Gumiel (diseño); Francisco de Amberes y Juan de Borgoña (estofado y policromía); Rodrigo Alemán, Felipe Vigarny, Diego Copín de Holanda y Sebastián de Almonacid (imaginería); y Petit Juan o Peti Joan (entallado y filigranas).


Retablo Mayor, Catedral de Toledo.

:: Capilla Mozárabe: Está ubicada en el ángulo suroeste del templo, alojada en el interior del arranque de una torre que nunca se construyó. El nombre original de la misma, dado por el Cardenal Cisneros, fue Capilla del Corpus Christi en el año 1500 y su destino desde los inicios era el mantenimiento del rito hispano-mozárabe.

Capilla Mozárabe, Catedral de Toledo

La más plausible es el deseo del cardenal de conciliar en la catedral distintos sentimientos religiosos que aún se mantenían y por los que él sentía especial aprecio.  Ello explica el interés de Cisneros en que se recuperasen los códices, breviarios y misales, se restaurasen en la medida que ello fuera posible y se volviesen a publicar en nuevas ediciones. 

Al terminarse, la capilla mozárabe quedó como una planta cuadrada bajo una cúpula octogonal, bien por alguna de las muchas remodelaciones que sufrió después). La actual cúpula es del siglo XVII, obra del hijo de El Greco, Jorge Manuel Theotocópuli que la diseñó con ocho paños más linterna. +video resumen

:: Capilla de los Reyes Nuevos.

Más que una capilla puede considerarse como una pequeña iglesia (nº1) , de una nave con dos tramos y un ábside poligonal, más una sacristía y un vestíbulo de entrada, solución original de Covarrubias. Se construyó entre 1531 y 1534. Es la primera gran obra de Covarrubias en Toledo.

Los dos tramos de la nave tienen bóveda de crucería gótica pero toda la ornamentación y labra de los sepulcros son renacentistas. El primer tramo forma el cuerpo de la pequeña iglesia con algunos altares y en el segundo tramo es donde se encuentran los enterramientos reales trasladados y metidos en arcosolios renacentistas, obra de Covarrubias.

Tras el arco que da acceso al presbiterio se encuentran dos altares pequeños, obra neoclásica diseñada por Ventura Rodríguez. El altar mayor es de Mateo Medina.

:: Capillas del muro sur.
Sección del Altar de la girola.
::El coro
El coro en una catedral es el lugar de alabanza, este está situado en la nave central, frente al presbiterio y separado de éste por la nave del crucero. Longitudinalmente abarca el espacio de dos tramos. Lo más destacable es la sillería alta, realizada por los grandes artistas Felipe de Borgoña (o Bigarny) y el castellano Alonso Berruguete. La sillería baja es obra más antigua, de Rodrigo Alemán. Dentro del coro se encuentran otras obras de arte muy importantes además de los dos magníficos órganos musicales.
Coro, Catedral de Toledo

:: Vidrieras
Esta catedral es uno de los edificios castellanos que más vidrieras medievales ha conservado. Su realización va desde el siglo XIV al XVII, más las restauraciones del XVIII, con una evolución propia del transcurrir de los años y los cambios de estilo.
Las vidrieras más antiguas y también las más apreciadas por su belleza son las del rosetón del crucero (sobre la puerta del Reloj) y algunas de la girola, aunque éstas tienen un colorido más apagado. Después están las de la capilla mayor y las del brazo norte del crucero por el lado este que presentan unas enormes figuras de santos y apóstoles.

Roseton del crucero, Catedral de Toledo.


A comienzos del siglo XVIII se siguen haciendo vidrieras para restaurar las que se habían estropeado. El artista Francisco Sánchez Martínez (uno de los últimos vidrieros de la catedral) fue uno de los buenos restauradores, aunque ya no se producen innovaciones y los modelos se repiten. Durante los años de Guerra Civil Española las vidrieras sufrieron mucho deterioro pero en los últimos años del siglo XX se hizo una gran labor de restauración y recuperación dando al conjunto la brillantez de otros tiempos.


:: El transparente

El Transparente, Catedral de Toledo
 
Se llama trasparente en la catedral de Toledo a una obra escultórica realizada entre 1729 y 1732 por el gran escultor del barroco Narciso Tomé (ayudado por sus hijos), nombrado arquitecto suplente en 1721 en esta catedral. Se encuentra en el muro absidal, en el trasaltar mayor. La obra es de estilo barroco y churrigueresco. Se realizó en tiempos del arzobispo Diego de Astorga y Céspedes que tuvo su mandato entre los años 1720-1734 y cuya tumba se halla a los pies del altar de este transparente. En el ángulo inferior de la derecha puede verse una inscripción grabada en latín donde se da a conocer al autor. Traducido al castellano es como sigue:
«Narciso Tomé, Arquitecto Mayor de esta Santa Catedral Primada, delineó, esculpió y a la vez pintó por sí mismo toda esta obra compuesta y fabricada de mármoles, jaspe y bronce»
La idea de hacer este transparente rompiendo el muro absidal surgió con el fin de dar luz al sagrario que se encuentra justo a su espalda. Se abrió un óculo a través del hueco despejado en el muro. A su vez este óculo recibe la luz de los tragaluces hechos en la parte superior del ábside, de manera que el transparente queda iluminado al mismo tiempo que reparte la luz a través del óculo hacia el sagrario. Dicho óculo puede recordar al que talló Bernini sobre el altar de la Cátedra de San Pedro en Roma. 
 

:: Tesoro Mayor de la Catedral
El Tesoro está ubicado en lo que fue antigua capilla de San Juan Bautista, o del Quo Vadis, o de la Torre, que de las tres formas se llamó. Ocupa el espacio frontero a la capilla Mozárabe, en el lado norte, justo debajo de la torre. 

Tesoro Mayor, Catedral de Toledo

El objeto más importante que se guarda en la capilla del Tesoro es la gran custodia de Enrique de Arfe (encargo del cardenal Cisneros) que elaboró entre 1517 y 1524. Es de traza gótica arcaizante y de una gran belleza arquitectónica. En un principio se labró en plata pero a finales del siglo XVI el arzobispo Quiroga mandó que se dorase, para hacer juego con la custodia del altar mayor, que es de madera dorada.

¡ OJO AL DATO ! La custodia está armada con la ayuda de 12.500 tornillos que la sujetan, 5.600 piezas diversas y 260 figurillas. Se emplearon 183 kg de plata más 18 de oro.


:: Enterramientos
Se encuentran en esta capilla los enterramientos de gran parte de la dinastía Trastámara.
 

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